Estos días me he encontrado algunas cosas sobre agua y peces atrapadas que me apetecía mostraros,  éstas, me han llegado a recordar otras del pasado que también quería compartir.

La primera y más llamativa nada tiene que ver con el arte aunque a simple vista pudiera parecer la instalación de algún artista contemporáneo, o mejor, la escena de una película con argumento distopico en el que la naturaleza salvaje recupera su espacio en un mundo a la deriva sin especie humana que la doblegue.

Lo que ha pasado en un antiguo centro comercial abandonado de Bangkok ofrece un espectáculo de inusitada belleza estética, digna del mejor especialista en efectos especiales.

El centro comercial New World, fue proyectado con 11 planta lo que incumplía todas las normativas urbanísticas, por lo que los 7 primeros pisos fueron demolidos para adaptarse a ella, poco después, en el 1999 el centro comercial se quemó sospechosamente y hubo varias muertes, por lo que el edificio se precintó y ha permanecido abandonado a su suerte durante más de 15 años y el agua de lluvia ha acabado estancándose en su interior formando un embalse natural encerrado entre las paredes de esta contrucción en ruinas.

En algún momento del año 2000 un desconocido comenzó a introducir especies exóticas en su interior, algunos dicen que la intención real era acabar con la plaga de mosquitos generadas por el agua estancada, y la pequeña población de peces comenzó a prosperar convirtiéndose en un acuario gigante o más bien una piscifactoría urbana autosostenida, y sorprendentemente poblada.

Este secreto lugar que ha permanecido resguardado de las engorrosas visitas de curiosos  aventureros, ha sido mostrado al mundo en el blog de viajes del cocinero Jesse Rockwell que no ha querido desvelar su secreta ubicación, aunque ya hay mucha documentación previa de este espacio en google.

Y sin más os dejo las fotos que hablan por sí mismas.

Estas imágenes me han traído a la cabeza otras, también relacionadas con aguas estancadas,  relacionadas con la cosa artística pero  que claro, quedan muy mermadas ante semejante espectáculo de la naturaleza.

Sin esforzarme mucho ni estrujar la mente, recuerdo algunas instalaciones relacionadas con este tema, una que tiene bastante que ver con las famosísimas cabinas de teléfono de Benedetto Bufalino, y que ha llevado a cabo Walter Hugo & Zoniel para la 2014 Biennial Liverpool, se llama The Physical Impossibility of Inspiring Imagination in the Mind of Somebody Living y consiste en la creación de un acuario de medusas dentro de una antigua tienda de Liverpool.

También, relacionada con agua embalsada, recuerdo la instalación de Michael Cross llamada Brige, la piscina bajo la que andar sin mojarse de Leandro Erlich, también la instalación en forma de proyección también sobre piscina, de Michael Pinsky, el  Pulse Tank de Rafael Lozano-Hemmer, las maravillosas instalaciones sonoras de Finnbogi Pétursson y por supuesto la cautivadora foto del gran artista Gabriel Orozco llamada From Roof to Roof.

Y una de mis favoritas, por su sencillez, Living House, de Simon Hussleinen la que se proyecta directamente en las ventanas de un edificio lo que está pasando dentro de unas peceras situadas en el interior.

Algunas pinceladas, para que investiqueis si os apetece, y para que añadáis a la lista otras piezas que se me hayan pasado a mí, hay cientos con esta temática.

Las obras las he conocido por distintas fuentes que he intentado referenciar en el artículo, sólo tenéis que seguir los links.