Otro día de esos a que me voy a dar un paseo por el trabajo de algún clásico que admiro… hoy le toca el turno a Larry Bell, un artista que empezó a trabajar en los 60 y que me impresiona con un trabajo lleno de sensibilidad y delicadeza.
Poco voy a decir de él puesto que la red esta llena de referencias de su trabajo, sólo mencionar que trabaja con los límites de la percepción, creando piezas en las que el entorno y la pieza forman un conjunto en el que resulta difícil delimitar dónde empieza y termina cada uno.
Hoy me he acordado de él repasando otras cosas y me apetecía muchísimo compartir con vosotros, estas piezas que son una verdadera gozada para la vista.
Me encanta, gracias Remedios.
Qué fantástico, Remedios, qué sensación de calma y serenidad. Gracias por traerlo. Saludos.