No he podido evitar asociar estas dos fotos, que tontería, la primera tan cursi y la segunda tan impactante y es que me imagino que el pájaro ha robado la lámpara, ha salido de la casa y volando por toda la ciudad no ha podido aguantar el peso y la ha dejado caer, impactando sobre el asfalto.

En fin una chorrada que me en realidad me sirve como excusa para dejar por aquí el trabajo de Kristof Kintera, un escultor bastante surrealista, que utiliza elementos de uso corriente como electrodomésticos, alimentos, sacos de cemento, bicicletas, muchas bicicletas, herramientas, material eléctrico…

Algunas piezas son realmente buenas otras no tanto, siempre para mi gusto, claro.

Os dejo fotos que me voy a la Noche en Blanco de Madrid, a ver cómo plantan árboles.