Toda la obra del arquitecto Ryuji Nakamura tiene en común ligereza y blancura, como una hoja de papel inmaculado y parece pensada para ser disfrutada con el sentido de la vista.
Sus diseño tienes más que ver con la escenográfia que con la pura construcción y me da la sensación que más que para usar están concebidos para levitar con y en ellos.
Muebles, proyectos de interiorismo, escaparates, escenografías, piezas artísticas, vestidos… todo lo que este artista intervien adquiere una apariencia eterea muy reconocible.
Su material favorito es el papel que teje y moldea a su antojo para conseguir resultados que mucho tienen que ver con la papiroflexia. Incluso cuando utiliza la madera, el plástico o la tela lo hace con la misma estética.
Además de los efectos de papel, también le gustan los complejos entramados de formas sinuosas que teje y enreda para formar complejas piezas.
Poco más que decir, sólo que me he quedado profundamente sorprendida al encontrar a este arquitecto, tan japonés, al que parece gustarle únicamente el color blanco.
Lo he visto aquí.