Si el otro día hice una selección personal del catálogo fotográfico de Michael Kenna con esas imágenes en blanco y negro que en mi mapa mental iban directamente al compartimento land art, hoy voy a hacer lo propio con el portfolio fotográfico del artistas hongkonés Dustin Shum.

Viendo su trabajo, no he podido evitar de nuevo, pensar en otras manifestaciones artísticas que se salen de las puramente fotográfica y que mi mente archivaría en anaqueles asignado a intervenciones urbanas y a performances callejeras.

Me admira comprobar, con qué acierto ha logrado captar y fotografiar un tipo de escenarios sin manipular, pero que mi cerebro, inmediatamente asocia a cosas vistas de algunos artistas, cuyos trabajos en el espacio público tienen una apariencia similar.

Podría escribir algunos nombres, pero me apetece que cada uno busque sus propias conexiones, si es que las encuentra, porque me estoy dando cuenta que últimamente miro con ojos artísticamente golosones cada elemento que se repite, cada palo fuera de contexto, cada personaje haciendo algo extraño en la calle, cada mezcla de colores en una pared…

Espero que si es una enfermedad, tenga cura… o me veo con una cámara sacando fotos de las cosas más peregrinas y subiéndolas al ático como si se tratara de las piezas más excelsas, dios no lo quiera… con la de hierbas salvajes que ya me crecen por aquí, si encima me dedico a podarlas, cultivarlas y abonarlas, se me va a asilvestrar esto de una manera, que voy a acabar no discerniendo…

Pero bueno, mientras me curo, me ha divertido buscar asociaciones de autoría en las fotos de Dustin. Vale, tampoco quiero engañar, no a toda imagen he podido asignarle un artista concreto.

Ahí las dejo, para que el que quiera lo intente. Otra posibilidad, es ojear tranquilamente la producción de este hombre, que tiene un ojo prodigioso para captar encuadres y situaciones anómalas y en muchos casos altamente poéticas. No perderse su serie Live alone a Life.

Y para mi mal artístico, rezo día y noche «virgencita… que me quede como estoy…» que ya hay demasiados «artistas» y en algunas ciudades empiezan a ser multitud… hecho que puede llegar a ser incómodo, por lo que me han contado. Pero bueno, por otro lado ando tranquila que en Madrid eso no está aconteciendo y tardará…

Este trabajo lo he conocido aquí.