Shinji Ohmaki, nos hace reflexionar sobre el peso que el aire ejerce en nuestro cuerpo y lo hace mediante una delicada y suave instalación, con la que dan ganas de interacturar. Se llamó Liminal Air y consistió en 123.000 cuerdas de nylon suspendidas del techo de un sala, creando un flotante volumen ondulado.
El autor pretendía, de manera práctica, que fuéramos un poco más consciente de lo que nos rodea, por ejemplo del aire, en el que apenas reparamos a pesar de ser imprescindible para la vida.
La inspiración le vino al autor de una cueva que se encuentra en el Monte Fuji, el concepto: la voluntad de reflexionar sobre la percepción humana …
A mí, además de darme muchísimas ganas de estar allí, un raro corto, me divierten sobre todo las imágenes la gente sumergida hasta que sólo se les ven las piernas y los piececillos descalzos.
Me encanta! Que bonita idea.
Siempre que regreso a este atico, encuentro cosas maravillosas
estudio diseño y siempre me interesó el arte, en (casi) todas sus formas
=)))
que agradable conocer el mundo a traves de las imágenes que recolectas
Fantástico! Qué ganas de entrar ahí y jugar!
Me encanta tu blog, felicitaciones….
Aprendo mucho aqui