Sorprendentes instalaciones de apariencia minimalistas llevadas a cabo con las cintas magnéticas recicladas de antiguas películas VHS.
Zilvinas Kempinas usa estas cintas de vídeo para crear instalaciones escultóricas de gran envergadura, de apariencia muy frágil y efímera pero sorprendentemente resistente. Por la acumulación ordenada de muchas de ellas, consigue interesantes juegos ópticos a base de líneas abstractas de superficies negras y brillantes que reflejan la luz y se animan cuando se ponen en movimiento.
Este material básico y familiar consigue además, que el espectador reflexione sobre la memoria del pasado y la obsolescencia ya que en estas cintas están grabados momentos del pasado que ahora son casi imposibles de visualizar, esto hace que cada una de sus instalaciones esté cargada de nostalgia y quizás de añoranza.
Es una cualidad fundamental de muchas de sus piezas, la manera casi mágica en la que desde lo más pequeño alcanza una monumentalidad insospechada. Aunque otras veces se queda en los más leve, como puede ser conseguir que nos quedemos enganchados con una cinta que flota aleatoriamente en el aire, movida por ventiladores.
Para saber mucho más sobre este trabajo os recomiendo leer este artículo en el que se hace un desglose exhaustivo de su obra, en él podréis ver más trabajos igualmente interesantes.
Lo he conocido aquí y las fotos las he sacado de el mismo reportaje y de google.
Me tiro de los pelos. Te prometo que hoy he llevado casi todas las cintas que tenía en casa.
Me ha fascinado. Gracias de nuevo.
Muy interesante, nosotros realizamos una experiencia parecida en año pasado en la casa de la moneda, con una instalación efimera llamada «intervención VHS»
http://www.youtube.com/watch?v=f4z8TqONPsU
Os dejo el enlace del proceso.
Saludos