No es la primera vez que hablo sobre lo infeliz que me siento con la saturación publicitaria en el espacio público de Madrid y lo bueno que sería que el ayuntamiento pusiera manos a la obra para retirar definitivamente de las fachadas, esos antiestéticos rótulos luminosos que nos deslumbran con sus llamativas luces, sus chillones colores y su dudoso gusto… por no hablar de que tapan fachadas de interés histórico.

Hace un mes leí, que ya estaban en ello, y que se habían retirado 223 soportes publicitarios e impuesto 600.000 euros en sanciones, en cumplimiento de esta normativa que entró en vigor en el 2007. Pero el artículo también decía que «en estos meses de vigencia de la nueva ordenanza se han tramitado 415 licencias para la instalación de emplazamientos publicitarios: 316 de soportes, 85 para acciones publicitarias «especiales y efímeras» y 14 para acciones publicitarias «experimentales»… es decir que se tramita más de lo que se desmantela…

Así que vuelvo mis ojos cansados, por enésima vez, a Sao Paulo, ciudad que ha dado un ejemplar paso para mantenerse limpia de publicidad, gracias a una política sin contemplaciones que ha logrado mejorar la estética de la ciudad y añado yo, la higiene visual de los que pasean por sus calles…

Dejo un vídeo sobre los cambios que han experimentado las calles de Sao Paulo desde que la publicidad no tiene espacio en sus calles, otro sobre el desmontaje de los soportes. Y alguno claramente publicitario, otro en contra y otro simplemente bonitos… hay para todos los gustos.

Gracias Frágil por recordarme todo esto. Hoy la cosa va de vídeos lo siento ya se que no es lo que mas os gusta.