Hoy toca «proyecto de fin de curso con mínimo coste y vistoso resultado».
Es una instalación llevada a cabo durante un workshop dirigido por el diseñador Robert Janson, con las más comunes de las bolsas de plástico, llenas de aire, formando composiciones regulares que al unirse entre si, dan lugar a una gran instalación flotante.
Esta pieza, ligera y sutil, se iluminada con focos que van cambiando de color (lo que menos me gusta, qué manía) pudiéndo apreciarse como una gigante luminaria construida a base de módulos de plástico y aire.
Me alegra comprobar que los productos cotidianos, si se utilizan de manera creativa, pueden convertirse en fantásticas obras, baratas y de lo más efectivas.
Lo sé dónde lo vi, pero lo he recordado al repasar mi tumblr. Las fotos son del autor.
SOIS UNOS VERDADEROS ARTISTAS!
…¿no te recuerda a Warhol? 😉