Aún ando conmocionada y desagradablemente incómoda después de ver ayer «El régimen del pienso», una pieza teatral que recomiendo, si a uno no le importa asomarse a una realidad muy cercana, que los maestros de La Zaranda nos presentan de manera realista, sin artificios y a ratos con cierta ironía que ayuda a pasar mejor el trago de lo que allí se representa, que acaba removiéndote la moral en lo más profundo…
Así que no tengo muchas ganas de escribir por lo que simplemente os voy a dejar con una instalación de Heppe Hein que refleja un poco la sensación de opresión que sentí según iba pasando el tiempo sentada en mi butaca del Teatro María Guerrero.
La obra en cuestión se llama Changing Space y es una intervención espacial en la que una pared adicional se construye en el extremo de un espacio de exposición. Al principio, la habitación parece vacía y que en ella no pasa nada ya que la pared está diseñado para parecerse exactamente a las paredes originales del espacio, en tamaño y apariencia.