Hace tiempo que quería mostrar el trabajo de Maider Lopez pero por unas cosas y otras siempre lo voy dejando.
Pero estos días, viendo imágenes de la gente de vacaciones, me ha venido a la cabeza su instalación Playa y he decidido dedicarle hoy espacio en el Ático.
Su trabajo constituye una reflexión sobre los códigos visuales que rigen el espacio, en la confluencia entre el urbanismo, la arquitectura y el diseño. Ya sea en el interior o en el exterior del museo, sus piezas tratan siempre de enfatizar aquellos aspectos que permanecen en un segundo plano, pero que no por ello dejan de ser relevantes.
Ella lleva a cabo intervenciones que provoca interferencias en el paisaje, que nos llevan a cuestionarnos los códigos establecidos, dándonos una perspectiva nueva de la realidad a través de sus escenarios trucados.




















