Desde hace tiempo quería ponerme al día con le trabajo de mi admirado e1000 ink que sigue dándome alegrías en mis paseos diarios, esta vez en forma de inteligentes efectos ópticos que dan vida a la aburrida escena de la ciudad.
En algunos de sus trabajos, alcantarillas, tapas, rejillas, registros y todos esos elementos cotidianos que pasan totalmente desapercibidos a nuestros ojos, son sombreados por este artista, con animados colores, de manera que tomar vida y dimensiones insospechadas, convirtiéndose en modestos protagonistas del asfalto o de cualquier anodina fachadas.
Me gusta especialmente su serie de podios pintados en el suelo, en ello cualquiera se puede sentir en lo más alto, sin necesidad de tener que hacer ningún esfuerzo para subir. Nada mejor para sentirse bien después de un duro día.